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sentimientos

El proceso de lenguaje entre un adulto y el niño empieza cuando el niño nace. Antes incluso de que aprenda a hablar. Para tener comunicación, los adultos precisan estar atentos a las señales y gestos, esto es,  expresiones, miradas,  sonrisas, muecas…

La comunicación con el niño

Padre hablando a su hija

El niño precisa vivir en un entorno humano y cálido donde perciba caricias y sonrisas,  donde pueda escuchar y responder con sonidos y movimientos desde que es un bebé. Ayuda  también a tener a su lado personas a las que pueda ver, tocar,  sonreír,  gorjear… etc a las que responder y que le respondan a él.

El niño siempre necesita que se le hable y se le ayude a decir lo que piensa, lo que quiere, lo que siente. Necesita que se le cuide, que atiendan y den respuesta a sus preguntas e inquietudes.

De hecho, el lenguaje es el instrumento de comunicación más importante que tiene un niño, le sirve para transmitir sus necesidades, sentimientos e ideas.

Por otra parte, el lenguaje permite al niño ordenar su pensamiento, expresar a través del lenguaje sus ideas, el humor, nombrar a las personas, las cosas y los propios sentimientos. Leer el resto de este artículo ⇒

Un juguete puede reforzar enormemente el vínculo afectivo entre padres e hijos. Cabe resaltar que la demostración de cariño durante los primeros años del menor es vital, para un adecuado desarrollo de la personalidad.

Desarrollo afectivo con juguetes

Desarrollo afectivo infantil

Regalar un juguete resulta un excelente detalle para colocar una sonrisa en la cara de nuestros hijos. Pero no es suficiente. No basta con dejar un juguete e irnos, porque, de encontrarse el niño en una situación conflictiva, intentará exteriorizar sus sentimientos a través del objeto. Es así que vemos a pequeños que no pueden vivir sin su oso o muñeca preferida.

Él o ella se convierten en su confidente y crean un vínculo afectivo con el mismo, lo cual no es negativo, pero recordemos que nuestra presencia como padres debe ser fundamental.

De cualquier manera, los juguetes con los que debemos interactuar, sobre todo en sus primeros años son los muñecos, animales y peluches.

Si buscamos un juguete que contribuya a que el niño demuestre sus afectos, debemos elegir aquel que tenga un buen tamaño, armonía de colores, sea durable y suave al tacto, así como poder vestirlo y desvestirlo. Como ejemplo tenemos: osos, peluches, muñecas de trapo, etc. En cambio, lograremos el efecto contrario si elegimos un juguete fácilmente rompible, con colores demasiado fuertes, desproporcionado de tamaño, sin vestidos y una postura rígida.

A medida que el niño crece, es posible apreciar los siguiente avances realtivos al área socio emocional: 

Edad Logros
0 – 5 meses Manifiesta conocimiento con sus manos.
Quiere ser cogido en brazos por sus padres.
6 – 11 meses Juega a juegos como el cucú o  al escondite.
  Responde cuando dicen su nombre.
12  – 17 meses Comienza el contacto social con otros niños.
Imita lo que hacen otros niños.
18 – 23 meses Cumple normas del día a día.
Le gusta jugar con otros compañeros.
2 años Reconoce su nombre.
Usa un pronombre o su propio nombre cuando se  refiere a él mismo.
3 años Sabe diferenciar hombres y mujeres.
Responde cuando hay un contacto social si los adultos son conocidos.
4 años Expresa sus sentimientos.
Elige a sus amigos.
5 años Le gusta participar en juegos competitivos.
Diferencia las conductas aceptables de las reprobables.
6 años Se comporta como un líder cuando se relaciona con otros compañeros.
  Solicita ayuda de adultos  cuando la necesita.

La socialización infantil conocida también como inteligencia emocional. Se centra en las capacidades sociales y características emocionales del niño que forman su carácter, determinan su personalidad y como  interactua con el entorno social.

El área socio-emocional trata principalmente la habilidad que tiene el niño para identificar y expresar sus sentimientos y emociones. Abarca también, la suma de experiencias afectivas y sociales que el niño siente como individuo único, distinto a los demás, a la vez que comprendido y querido. Con la capacidad de relacionarse con el resto de personas con normas comunes.

Desarrollo social y emocional en niños

Desarrollo socio emocional infantil

Para desarrollo socio-emocional del niño es básica la participación de los padres y familiares para crear vínculos afectivos, porque hasta los 2 años el niño interactúa prácticamente solo con ellos. Por ello, es importante acunarlo, darle seguridad, y hacer que se sienta un miembro más de la familia que siempre le dará atenciones, amor y cuidados para su buen crecimiento.

Los adultos del entorno constituirán para el niño un ejemplo y referencia a la hora de aprender como actuar frente a otros y como relacionarse con ellos. En resumen, como ser una persona social. Leer el resto de este artículo ⇒