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El proceso de lenguaje entre un adulto y el niño empieza cuando el niño nace. Antes incluso de que aprenda a hablar. Para tener comunicación, los adultos precisan estar atentos a las señales y gestos, esto es,  expresiones, miradas,  sonrisas, muecas…

La comunicación con el niño

Padre hablando a su hija

El niño precisa vivir en un entorno humano y cálido donde perciba caricias y sonrisas,  donde pueda escuchar y responder con sonidos y movimientos desde que es un bebé. Ayuda  también a tener a su lado personas a las que pueda ver, tocar,  sonreír,  gorjear… etc a las que responder y que le respondan a él.

El niño siempre necesita que se le hable y se le ayude a decir lo que piensa, lo que quiere, lo que siente. Necesita que se le cuide, que atiendan y den respuesta a sus preguntas e inquietudes.

De hecho, el lenguaje es el instrumento de comunicación más importante que tiene un niño, le sirve para transmitir sus necesidades, sentimientos e ideas.

Por otra parte, el lenguaje permite al niño ordenar su pensamiento, expresar a través del lenguaje sus ideas, el humor, nombrar a las personas, las cosas y los propios sentimientos.

El niño que no puede comunicarse, que no puede interactuar, que tiene atenciones,  sencillamente, no es feliz.

Un niño no atendido pierde interés en la vida, no tiene apetito y corre el riesgo de que su desarrollo físico o mental no sea el adecuadol. De hecho, si la madre o cualquier persona que cuida al niño lo mantiene aislado o tumbado sin hablarle y sin darle a conocer el mundo, el niño tendrá problemas para desarrollar su lenguaje y su mente.

Es más, si el niño no logra desarrollar lo suficiente su lenguaje, le resultará muy difícil adaptarse y llegar a tener éxito en la vida escolar. En cambio, si lo desarrolla correctamente, dispondré de una herramientamuy importante para su adaptación a nivel educativo, como social y laboral en el futuro.

Cabe señalar que un niño que hable poco, o que sea retraído y se aislea,  o que use un vocabulario muy reducido, está en riesgo en su desarrollo psicosocial y precisa una mayor atención por parte de la madre, padre y familia en general.

   

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